La iniciativa, de autoría de las representantes Juliana Aray y Carolina Giraldo, contempla medidas de atención y acompañamiento psicosocial para niñas, niños y adolescentes que hayan quedado huérfanos por este delito.

El proyecto de ley brindará asistencia psicológica, legal, económica, emocional, educativa, recreacional, cultural y deportiva a menores en situación de vulnerabilidad económica que hayan sido víctimas de feminicidio.

“Esto es un paso importante para garantizar que los hijos e hijas de víctimas de feminicidio no queden en el olvido. El Estado tiene la responsabilidad de proteger a estos niños y niñas, que ya han sufrido una pérdida irreparable”, afirmó la representante Aray.

El seguimiento y la implementación rigurosa de esta ley serán fundamentales. El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), junto con el Ministerio de la Igualdad, presentarán un informe anual al Congreso, proporcionando detalles sobre las políticas implementadas, programas desarrollados, recursos asignados y logros obtenidos en beneficio de estos menores.

Esta ley beneficiaría a los hijos e hijas de mujeres víctimas de feminicidio que se encuentren en situación de pobreza o pobreza extrema. El proyecto pasará a la plenaria de la Cámara de Representantes, donde se discutirá y votará en segundo debate.